martes, 2 de febrero de 2010

LOST: perdidos en la Isla otra vez



Conozco a por lo menos media docena de personas, entre ellas yo, que empezó a ver LOST cuando la serie tenía ya unas tres o más temporadas en el aire y que tuvo que soplarse todas las temporadas previas en una o dos semanas para estar al día con la temporada de ocasión. Recientemente, una amiga para quien LOST no significaba nada hace muy poco acaba de entrar al grupito nada pequeño de seguidores de LOST ¡mirando las cinco primeras temporadas en dos semanas! Y no es que haya estado de vacaciones sino que la serie sencillamente la atrapó. Cuando se trata de LOST eso es completamente creíble. La serie engancha en one.

Todo el mundo, o mejor dicho, para no exagerar, sus seguidores, tenemos muchas expectativas sobre cómo concluirá la historia de LOST. Salvo algunos tropiezos en la segunda temporada, que por suerte no terminaron por malograrla, las demás temporadas etuvieron notables y terminaron de darle consistencia a la serie. Una serie que ha cruzado varios géneros, tantos que bien podrían algunos decir que es una serie de aventuras; otros, de misterio; otros por allá, de historias sobrenaturales; varios otros, de ciencia ficción; algunos otros, de debates filosóficos y existenciales (lo místico versus lo racional, la lucha entre el bien y el mal); y no pocos, de romance (sí, también cabe ese género).

Muchas fichas han sido mostradas ya para la temporada final, pero quedan varias cosas por definir. Conforme se acerque el capítulo final la conclusión se hará más evidente y el final más predecible, por lo menos con respecto a todo el misterio que rodea a la isla. Espero que, en ese respecto, el final sea coherente y que el afán por sorprender al público no termine por crear un final sin sentido o forzado (se pueden hacer giros inesperados cuando quedan muchos capítulos para poner más piezas al rompecabezas, pero no tantos cuando quedan ya pocos). El arte de los creadores estará en manos más de su maestría para contar historias en las que más o menos se puede intuir el final [un arte que, dicho sea de paso, dominan a la perfección, si recordamos varios capítulos con ese corte, especialmente “LaFeur”, uno de los episodios con el final premeditadamente más previsible de la 5ta temporada, pero magníficamente contado de principio a fin], que en su maestría para crear giros inesperados. Además, no lo necesitan: la historia tiene otros elementos, además de los giros inesperados respecto a la isla, como el drama individual de cada uno de los personajes, que nos ha envuelto desde que comenzó la serie, que estoy seguro que el suspenso estará garantizado hasta el fin.

:)

No hay comentarios: